l tema de conversación de estas últimas semanas, han sido las altas temperaturas que tenemos en México y parece que así seguiremos unas semanas más.

Debemos tener especial cuidado en el riego de nuestro huerto, pues es muy fácil que con el sol y el viento, el suelo se seque muy rápido y si esto pasa, nuestras hortalizas lo resentirán. Lo que he visto estos días en los huertos a los que les doy mantenimiento, es que si la tierra está humedecida (mínimo un riego diario, aunque esto depende de la radiación solar que reciba nuestro huerto), las hortalizas están creciendo como locas, permitiendo cosechar diariamente hojas tiernas de lechugas, acelgas, espinacas, kale. Pero si no se riega lo suficiente, entonces las plantas no sólo se ven un poco marchitas, sino que dejan de crecer, pues la poca agua que reciben les permite sólo sobrevivir, por lo que no se enfocan en crecer.

Así que les recomiendo que rieguen diario, pongan alguna malla sombra y mantengan un buen acolchado, para que el sol no afecte al suelo y a las plantas.

También es importante regar muy temprano en la mañana o ya en la tarde que baje la temperatura. NUNCA regar alrededor del mediodía, pues el agua y el sol pueden quemar las hojas de las plantas. No importa lo marchita que se vea la planta, lo mejor será regar directamente el suelo.

También hagan poda de todas las hojas y ramas que no estén en óptimas condiciones (hojas amarillas, enfermas o marchitas), pues debemos ayudar a la planta a enfocar todos sus recursos (sobretodo agua) en aquellas estructuras que le permitan seguir creciendo.

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